Durante el mes de abril de 1937, en plena ofensiva del general Mola, Bilbao sufrió numerosos bombardeos aéreos que dejaron como resultado 256 muertos y 146 heridos entre la población, según los recuentos realizados por el departamento de Gobernación del Gobierno de Euzkadi.
El día 18 de abril, la villa sufrió tres incursiones aéreas, la tercera de las cuales fue a cargo de tres aviones bombarderos Heinkel He-111 del grupo K/88, junto a otros tres Dornier Do-17 de la escuadrilla experimental de bombardeo VB/88, todos pertenecientes a la Legión Cóndor alemana al servicio de los sublevados.
Durante la operación, la aviación de caza republicana consiguió alcanzar con sus disparos a uno de los modernos bombarderos Dornier enemigos. Este avión, alcanzado, en su huida dejó caer sus bombas sobre los barrios populares de Iturribide y Begoña. En Iturribide, a la altura de la fábrica de calzado de Cotorruelo, las bajas entre la población civil se contaron por decenas, entre ellas este bebé de la fotografía.
Por su parte, el avión intentó escapar, en vano. Dos de sus tripulantes murieron al saltar en paracaídas a muy baja altura, por la colisión, en las cercanías de Arrigorriaga. El piloto, murió al estrellarse el aparato en el monte Atxerre, entre Galdakao y Zaratamo.
Este monolito, posteriormente localizado en Asua, recordaba a los tres aviadores nazis muertos. Actualmente, gracias a la cortesía del Ayuntamiento de Erandio, se haya en el Museo Memorial del Cinturón de Hierro de Berango, debidamente contextualizado, como prueba de la intervención nazi en Euskadi.
Esta reproducción a escala 1/30, obra del modelista Manu Paz Varela, muestra cómo era el avión Dornier Do17 experimental, numerado 21-2, que bombardeó Bilbao el 18 de abril.
Por último, mostramos una fotografía de época del avión anterior una vez derribado, después de sembrar la muerte y la desolación sobre Bilbao.
Sirva este artículo como tributo en recuerdo de todas las víctimas civiles de ese día.
